domingo, 6 de febrero de 2011

Apariciones


  

   Me ha sucedido desde chico. Suelo poner la mirada en alguien, un señor flaco y barbudo con ropas de la india o una mujer vikinga, esbelta, con cara de haber sido poseída por las líneas de las baldosas en las veredas, y encontrarme de nuevo con ellos a la vuelta de otra esquina. Varios encuentros en el día pero no más de cuatro veces.  La casualidad de las apariciones siempre será el misterio a resolver. ¿Serán amigos de mis vidas pasadas que vagan errantes? Probablemente sí. Quizás tanto ellos como yo, no nos animamos a enfrentarnos. Quizás de forma inconciente calculamos la probabilidad y sólo nos rozamos con algunos metros de diferencia. Porque seguramente, si nos tocamos, abriremos la puerta a la comprensión de lo que significa el destino programado. Es mejor así. Que cada uno de nosotros funcione por separado. Hay mucha ciudad para perderse, todavía quedan pastos altos y sótanos para dormir. 

2 comentarios:

Anónimo dijo...

deben ser personajes que conocias de las fiestas electronicas esas a las que solias ir
JJ

C a r t u . dijo...

ajjajajj seguramente por ahí viene la mano.